Eso es lo que se espera después de los partidos de nuestros representantes este fin de semana. Es decir, un punto de inflexión. En ambos casos para bien, pero partiendo de premisas bien diferentes. Mientras que el filial daba un golpe encima de la mesa en Marchamalo, el primer equipo recibía la peor goleada de su historia en un partido lamentable.
PLG YUNQUERA A-ANVI ALOVERA (2-10)
Debacle, derrota histórica y punto de reflexión. Los yunqueranos, muy mermados por las bajas y con una gran representación del equipo filial, recibió la mayor goleada en su historia. Las bajas realmente son un factor, pero no pueden servir para justificar esa debacle. Sin intensidad, sin concentración, el Anvi ganaba por 0-3 en el minuto 6 de partido, con goles, además, totalmente evitables pues vinieron a partir de errores propios. Con esa puesta en escena (0-4 al descanso), sólo cabía la épica, pero ésta vez ni eso. Tan sólo hubo un amago de reacción cuando los yunqueranos pusieron portero jugador en la pista. Cambiaron la dinámica, tuvieron la posesión e incluso se acercaron en el marcador (2-7), pero de nuevo pérdidas absurdas de balón sentenciaron el encuentro. Partido para la reflexión, desde luego, pues a pesar de que un equipo pueda ser superior o no, el PLG no se puede permitir dar esta imagen de escuadra entregada, sin ambición. No es su filosofía, no es lo que le ha llevado hasta lo más alto.
INTECNO MARCHAMALO-YUNQUERA PLG B (1-2)
La alegría del fin de semana la ofreció la escuadra filial. Golpe encima de la mesa ante un rival directo que le permite reengancharse al tren de cabeza y de paso, ganar el golaverage particular a un adversario de esa zona alta. Los yunqueranos jugaron cómo y cuándo debían jugar, dominaron el tempo del partido y con las consignas claras en ataque y en defensa dominaron los primeros compases del encuentro. Los rojillos, esta vez, sí dieron la imagen de equipo serio y compacto que otras veces, quizá por la relajación, ha brillado por su ausencia. Y todo ello a pesar de que el conjunto marchamalero, en la única llegada que tuvo en la primera mitad, se adelantó en una falta de entendimiento entre el portero y la zaga rojilla. El 1-0 no cambió el guión establecido. Cabano a punto estuvo de marcar en un lanzamiento potente a la base del palo en la ocasión más clara, aunque llegadas yunqueranas hubo hasta el tiempo de descanso. Ahí, el mensaje fue claro y sencillo, si seguía por el mismo camino el partido caería de nuestro bando.
Y así fue. Los rojillos salieron con la misma mentalidad y siguieron controlando el encuentro con una intensa defensa y tapando la única vía de ataque del Intecno, el balón directo al pivote. David, en un robo de balón, logró batir al guardameta marchamalero (que ya había realizado alguna que otra buena intervención) y mandó silenciar a las gradas del nuevo polideportivo gallardo. Quedaba aún mucho tiempo por delante, pero el encuentro estaba en la mano de los yunqueranos. Más aún cuando Mario, tras una nueva recuperación, batía en el 1vs1 al segundo portero marchamalero con una tranquilidad y una calidad pasmosa. Este tanto desató el delirio en el bando yunquerano, aún consciente de que debería sufrir para cosechar esa importante victoria.
El Intecno puso en liza el portero jugador y gozaron de numerosas ocasiones, pero en esos dos últimos minutos comenzó a emerger la figura de Borja Pisuerga. El guardameta detuvo varios disparos lejanos, así como otro al segundo palo que se colaba en la escuadra. Aunque su actuación más destacable fueron los lanzamientos de doble penalti (y es que, curiosamente, los marchamaleros llegaron a 4 faltas en el minuto 10 de la segunda mitad, pero, al parecer, no volvieron a cometer ninguna infracción -algo imposible estadísticamente hablando-, mientras que los rojillos vieron como su casillero de faltas subía en cada acción defensiva hasta el punto de recibir dos dobles penaltis y una falta al borde del área sin barrera). Desde una serenidad y una confianza pasmosas, Borja amarró los importantes tres puntos que le permiten a su equipo amarrarse con fuerza a los puestos altos de la tabla (a cuatro puntos del primero y el segundo clasificado, el Aluminios Castilla, con el que los yunqueranos se verán las caras este fin de semana en Yunquera, a partir de las 15.45 horas del sábado).
PLG YUNQUERA A-ANVI ALOVERA (2-10)
Debacle, derrota histórica y punto de reflexión. Los yunqueranos, muy mermados por las bajas y con una gran representación del equipo filial, recibió la mayor goleada en su historia. Las bajas realmente son un factor, pero no pueden servir para justificar esa debacle. Sin intensidad, sin concentración, el Anvi ganaba por 0-3 en el minuto 6 de partido, con goles, además, totalmente evitables pues vinieron a partir de errores propios. Con esa puesta en escena (0-4 al descanso), sólo cabía la épica, pero ésta vez ni eso. Tan sólo hubo un amago de reacción cuando los yunqueranos pusieron portero jugador en la pista. Cambiaron la dinámica, tuvieron la posesión e incluso se acercaron en el marcador (2-7), pero de nuevo pérdidas absurdas de balón sentenciaron el encuentro. Partido para la reflexión, desde luego, pues a pesar de que un equipo pueda ser superior o no, el PLG no se puede permitir dar esta imagen de escuadra entregada, sin ambición. No es su filosofía, no es lo que le ha llevado hasta lo más alto.
INTECNO MARCHAMALO-YUNQUERA PLG B (1-2)
La alegría del fin de semana la ofreció la escuadra filial. Golpe encima de la mesa ante un rival directo que le permite reengancharse al tren de cabeza y de paso, ganar el golaverage particular a un adversario de esa zona alta. Los yunqueranos jugaron cómo y cuándo debían jugar, dominaron el tempo del partido y con las consignas claras en ataque y en defensa dominaron los primeros compases del encuentro. Los rojillos, esta vez, sí dieron la imagen de equipo serio y compacto que otras veces, quizá por la relajación, ha brillado por su ausencia. Y todo ello a pesar de que el conjunto marchamalero, en la única llegada que tuvo en la primera mitad, se adelantó en una falta de entendimiento entre el portero y la zaga rojilla. El 1-0 no cambió el guión establecido. Cabano a punto estuvo de marcar en un lanzamiento potente a la base del palo en la ocasión más clara, aunque llegadas yunqueranas hubo hasta el tiempo de descanso. Ahí, el mensaje fue claro y sencillo, si seguía por el mismo camino el partido caería de nuestro bando.
Y así fue. Los rojillos salieron con la misma mentalidad y siguieron controlando el encuentro con una intensa defensa y tapando la única vía de ataque del Intecno, el balón directo al pivote. David, en un robo de balón, logró batir al guardameta marchamalero (que ya había realizado alguna que otra buena intervención) y mandó silenciar a las gradas del nuevo polideportivo gallardo. Quedaba aún mucho tiempo por delante, pero el encuentro estaba en la mano de los yunqueranos. Más aún cuando Mario, tras una nueva recuperación, batía en el 1vs1 al segundo portero marchamalero con una tranquilidad y una calidad pasmosa. Este tanto desató el delirio en el bando yunquerano, aún consciente de que debería sufrir para cosechar esa importante victoria.
El Intecno puso en liza el portero jugador y gozaron de numerosas ocasiones, pero en esos dos últimos minutos comenzó a emerger la figura de Borja Pisuerga. El guardameta detuvo varios disparos lejanos, así como otro al segundo palo que se colaba en la escuadra. Aunque su actuación más destacable fueron los lanzamientos de doble penalti (y es que, curiosamente, los marchamaleros llegaron a 4 faltas en el minuto 10 de la segunda mitad, pero, al parecer, no volvieron a cometer ninguna infracción -algo imposible estadísticamente hablando-, mientras que los rojillos vieron como su casillero de faltas subía en cada acción defensiva hasta el punto de recibir dos dobles penaltis y una falta al borde del área sin barrera). Desde una serenidad y una confianza pasmosas, Borja amarró los importantes tres puntos que le permiten a su equipo amarrarse con fuerza a los puestos altos de la tabla (a cuatro puntos del primero y el segundo clasificado, el Aluminios Castilla, con el que los yunqueranos se verán las caras este fin de semana en Yunquera, a partir de las 15.45 horas del sábado).