Por el PLG jugaron: Javi, Carlitos, Víctor, Kiko y Javi R. - quinteto titular-, también jugaron: Nacho, Sergio, Gallego, Punko, Alfon y Cabano.
Goles: Kiko (2), Gallego y Sergio.
"Habéis demostrado que 'a cojones' no os gana nadie". Ésas eran las palabras de un buen seguidor del PLG Yunquera. No le faltaba razón. En un partido duro, intenso, de esos en los que no caben guiños a la galería, el PLG se puso el mono de trabajo y demostró que cuando se trata de coraje y garra pocos equipos son capaces de hacerle frente. Sumó así tres puntos (bastaba con sumar uno) que certifican, ahora ya sí, la permanencia matemática del equipo en División de Honor en el que será el décimo aniversario del club (uno de los clásicos ya de esta Liga Local).
No pudo el cuadro yunquerano desplegar el buen juego de la semana pasada ante el Iriépal. El Horche es un rival correoso, que le imprime mucha intensidad a los partidos (que se lo pregunten al Sepiolsa que no ha conseguido ganarles en ninguno de los dos encuentros) y que no deja lugar a las florituras. Aún así, en ese terreno, los yunqueranos siempre se desenvuelven bien. Cuando el partido requiere intensidad, defender e intercambio de golpes (entiéndase la metáfora pugilística), el PLG nunca falla.
El partido comenzó con dominio local, pero con el Horche avisando a la contra. Los rojillos no andaban finos en la circulación del balón ni en la creación de oportunidades. Fue la estrategia la que sirvió para abrir el marcador. Gallego (recuperando sus mejores sensaciones -segundo gol en dos jornadas consecutivas-) abría la lata, tras una falta de tiralíneas. En cualquier caso, faltaba claridad de ideas y el gol no sirvió como difuminador de ese panorama. Máxime cuando el Horche conseguía empatar antes del descanso.
En la segunda mitad, el partido se enrareció, también por la labor del colegiado, interrumpiendo cosntantemente el juego y mostrando tarjetas a los dos equipos, más que rigurosas (para un total de 10 para ambos bandos). Apareció entonces la figura de Kiko. El jugador rojillo que andaba negado de cara a gol, convirtió un auténtico golazo a la contra, que sirvió para relanzar a su equipo y que se vieran los mejores minutos de los yunqueranos. El guaje Víctor se sumó a la fiesta para, metiéndo un pase excepcional, habilitar un hueco imposible para que Javi cediese en boca de gol a Sergio. El 3-1 parecía traer la tranquilidad y hacía vaticinar una victoria cómoda, pero el Horche no bajó los brazos, logró el 3-2 con algo de fortuna y se metió en el partido. Tocaba sufrir. Sobre todo cuando Alfon veía la segunda tarjeta amarilla, de forma injusta, al ser derribado por dos contrarios cuando se disponía a tirar e interpretar el árbitro que había simulado la falta. El PLG tiró de garra y entrega y no recibió ningún tanto en ese período de inferioridad, pero tampoco supo matar el encuentro hasta que a falta de 1 minuto para el final, el Horche cometía la sexta falta y un Kiko con confianza amarraba la victoria desde el doble penalti.
Segunda victoria consecutiva y gran momento del equipo. El próximo rival, el todopoderoso Sepiolsa. Pero antes llega el parón de Semana Santa. Vacaciones merecidas pero que cortan el ritmo de los yunqueranos.
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