Un empate para empezar

Se pudo ganar (0-2 al descanso), se pudo perder (4-2 a falta de 1'40'') y se acabó empatando. El equipo yunquerano, en su gran mayoría compuesto por jugadores que la temporada pasada estaban en las filas del filial, comprobaron la dureza de la máxima categoría de Guadalajara, donde cada error se paga caro. En cualquier caso, arañar un punto en la complicada pista del Brihuega no es moco de pavo. Más aún después de haber ofrecido unas grandísimas sensaciones en la primera mitad, dando una imagen de equipo compacto, trabajador y duro, en la que todos sus miembros jugaron y aportaron. Incluso, funcionó la estrategia, fruto de ella nacieron los dos goles en la primera mitad. Pero tras el paso por vestuarios, el panorama cambió, los locales se adueñaron de la pelota y embotellaron a los rojillos, que también acusaron falta de fuelle físico. Así las cosas, los azulones consiguieron voltear el marcador y a falta de dos minutos para el final parecían sentenciar el duelo. No en vano, el PLG Yunquera tiró de orgullo y logró igualar la contienda en apenas 50 segundos. Incluso la suerte pudo ser mejor, pues en ese último minuto los rojillos dispusieron de dos dobles penaltis que pudieron suponer la rúbrica a un gran encuentro. Pero también pudo ser peor, ya que en el último minuto, el PLG se vio obligado a jugar con uno menos por la expulsión de Sergio.
No hay que obviar que los yunqueranos se vieron seriamente perjudicados por la actuación arbitral, no siendo señalados dos claros penaltis a su favor (además de otros dos lanzamientos de 10 metros que debieron ser pitados) y concediendo el cuarto gol local tras una falta del Azulejos Brihuega (que tras el gol señalaría como acumulativa). Errores flagrantes que impidieron sumar dos puntos más, merecidos, a los yunqueranos.

GOLEADORES: Sergio (2), David y Brutus.